Efectividad del tratamiento específico del músculo redondo mayor en pacientes afectados de síndrome subacromial
- Barra López, Martín Eusebio
- Orosia Lucha López Doktorvater/Doktormutter
Universität der Verteidigung: Universidad de Zaragoza
Fecha de defensa: 27 von Januar von 2016
- José Vicente Lafuente Sánchez Präsident
- Luis Bernués Vázquez Sekretär/in
- Concepción Vidal Peracho Vocal
Art: Dissertation
Zusammenfassung
Síndrome subacromial es un término genérico que incluye un amplio espectro de patologías que apenas se diferencian clínicamente. Es una dolencia con una alta prevalencia e incidencia, es un motivo muy habitual de consulta por patología músculo-esquelética y frecuentemente está relacionado con la actividad laboral. Desde que en 1944 Inman et al., introdujeron el concepto de que los músculos aductores del manguito rotador (subescapular, infraespinoso y redondo menor) colaboran con el deltoides en la elevación de la extremidad para minimizar el impingement subacromial, otros estudios posteriores han corroborado sus hallazgos y confirmado que los músculos del manguito rotador son un elemento fundamental en la estabilidad glenohumeral. No obstante, el hecho de que un subgrupo de pacientes con rotura masiva del manguito de los rotadores pueda mantener una función normal de su extremidad, nos debe hacer pensar que nuestro conocimiento es incompleto. Por otra parte, no siempre existe una relación explícita entre el sustrato anatómico o la carga funcional y la sintomatología. Muchos estudios coinciden en mostrar que también se encuentran alteraciones de las estructuras subacromiales, en pruebas de imagen realizadas a sujetos asintomáticos, por lo que, cuando aparecen estas lesiones en un sujeto con sintomatología, resulta arriesgado considerarlas como la causa determinante y sigue siendo imprescindible una minuciosa exploración clínica que tenga en cuenta otros posibles factores El músculo redondo mayor apenas ha recibido atención aunque, al igual que los músculos del manguito rotador, es un músculo escapulohumeral monoarticular si bien no forma parte de su tendón conjunto. Sin embargo, recientes estudios han demostrado que este músculo puede tener un papel más destacado del que se le ha otorgado tradicionalmente tanto en la biomecánica normal de la articulación glenohumeral, como en la sintomatología dada la alta prevalencia de puntos gatillo miofasciales en este músculo en sujetos afectados de dolor en el hombro de origen no traumático. Travell y Simons ya habían mencionado que los síntomas producidos por los puntos gatillo miofasciales del músculo redondo mayor pueden ser similares a los de otras causas de dolor en el hombro, como la bursitis subacromial o la tendinitis del supraespinoso. No tener en cuenta este músculo en la evaluación y tratamiento del paciente con dolor en el hombro puede ser causa de un diagnóstico diferencial incompleto o de peores resultados terapéuticos. Este estudio busca aportar evidencia sobre los resultados que se pueden obtener con un abordaje específico, mediante dos técnicas manuales, del músculo redondo mayor en sujetos afectados de síndrome subacromial, El protocolo del estudio fue aprobado por el CEIC del IDIAP JordiGol. La muestra está constituida por 96 sujetos con diagnóstico clínico de síndrome subacromial y presencia de puntos gatillo en el músculo redondo mayor, reclutados en un servicio de rehabilitación de un centro público de Atención Primaria del Instituto Catalán de la Salud. Los sujetos se distribuyeron aleatoriamente, mediante un procedimiento informático realizado antes del reclutamiento, en tres grupos: Grupo Fibrolisis, Grupo Liberación y Grupo Control. Todos los sujetos recibieron un tratamiento protocolizado durante 15 sesiones diarias (3 semanas) y, adicionalmente, los sujetos asignados al Grupo Fibrolisis recibieron 6 sesiones (2 por semana) de Fibrolisis Diacutánea aplicada directamente al músculo redondo mayor, y los sujetos asignados al Grupo Liberación recibieron 6 sesiones (2 por semana) de Liberación por presión del punto gatillo aplicada directamente al músculo redondo mayor. Se midió la intensidad del dolor, la movilidad y la capacidad funcional antes y después del tratamiento por un fisioterapeuta cegado respecto al grupo asignado. El fisioterapeuta que aplicaba las técnicas de tratamiento no se puede cegar al tratarse de técnicas manuales, pero no participaba en el reclutamiento por lo que se respetó la ocultación de la asignación. El Grupo Fibrolisis mostró mejoría significativa en todas las variables de resultados a excepción del movimiento en extensión. El Grupo Liberación mostró mejoría significativa en todas las variables de resultados a excepción de los movimientos en rotación externa e interna. El Grupo Control mostró mejoría significativa en la intensidad del dolor y en la función pero no mostró mejoría significativa en ninguna de las variables de movilidad. Las diferencias entre grupos fueron significativas para los movimientos de abducción y extensión entre el Grupo Liberación y el Grupo Control.